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Un parque es un lugar excelente para encontrar paz en la naturaleza. Sin embargo, el parque El Recorral, en el límite de la zona residencial de Quesada, pretende mucho más que eso. Además de la recreación y la deportividad, gracias a las largas caminatas que allí se pueden realizar, esta exuberante zona verde también está enfocada a la educación, reuniones sociales, juegos infantiles y protección del medio ambiente.
Curiosamente, el parque nació inicialmente por necesidad. El problema de los vertidos de aguas de las depuradoras de la zona de Rojales obligó a la empresa de aguas Hidragua a buscar una solución creativa junto con el ayuntamiento. El parque proporcionó el momento eureka. Cinco lagunas conectadas por cascadas son ahora el corazón del parque. La abundancia de agua dio lugar a una enorme biodiversidad, que poco a poco se fue extendiendo por todo el parque.
Se inició con la introducción de una serie de diferentes plantas acuáticas, propias de la zona de Alicante. Estos atrajeron una variedad de vida, como aves (acuáticas), reptiles, anfibios, ranas, libélulas y pequeños mamíferos.
Árboles plantados para dar sombra.
a lo largo de las fuentes de agua invitaban a su vez a otras aves. Las especies de árboles y arbustos se colocaron un poco más lejos del agua, lo que puede soportar mejor las condiciones secas. Un atractivo hábitat para conejos, palomas torcaces, cernícalos y pájaros carpinteros, entre otros.
La biodiversidad ha adquirido ahora proporciones espectaculares. Pero además de la rica naturaleza, el parque también tiene un gran atractivo para las familias para quienes la recreación es el objetivo número uno. Para los adultos, las instalaciones de picnic y barbacoa son un atractivo. A los jóvenes les encanta especialmente la forma en que se pueden jugar juegos divertidos. Los viejos troncos de árboles en todo tipo de variaciones son un cambio bienvenido con respecto a los parques infantiles tradicionales.
Curiosos son otros restos de árboles, que han sido transformados en preciosas tallas de madera. Un ejemplo de creatividad que induce a sonreír.
La ruta de los árboles 'parlantes' es educativa y divertida, donde podrás conocer más sobre el parque y sobre todo la variedad de árboles haciendo preguntas. En El Recorral no falta ni siquiera una pequeña biblioteca.
Hay un amplio aparcamiento en la entrada. Una buena señalización y paneles informativos ayudan a los recreacionistas a encontrar el camino fácilmente. Para los amantes del senderismo, en el sitio web de Wikiloc se puede encontrar una descripción de la ruta de 6,7 kilómetros de longitud.
Desafortunadamente, el entusiasmo por el parque también tiene sus desventajas. Puede haber mucha actividad, sobre todo los fines de semana, cuando muchas familias españolas procedentes de zonas lejanas se instalan en el verde.
